Un Greco en la Ciudad de México
Aún en pleno año 2017 se siguen descubriendo tesoros.
Es el caso del Estudio de San Andrés, obra del pintor renacentista Doménikos Theotokópoulos, mejor conocido en el mundo como El Greco.
Este enorme cuadro fue descubierto en México y la difusión del hallazgo estuvo a cargo de Los Contemporáneos A. C., que lo presentaron al público la semana pasada en la Biblioteca Mexicana de la Fundación Miguel Alemán.
De acuerdo con Salvador Riestra, presidente de Los Contemporáneos A.C., Entre 1590 y 1610, El Greco pintó varios cuadros con la imagen de San Andrés Apostol con la Cruz Aspada. Uno de ellos pasó por varios propietarios hasta que a fines del Siglo XIX terminó en la colección de Diego Cánovas en Madrid, España.
El Estudio de San Andrés es un óleo sin firma de 136.5 x 89.7 centímetros.
Cuando estalló la Guerra Civil Española (1936-1939), este cuadro fue llevado a Nueva York y depositado en un almacén, donde estuvo hasta 1964. De ahí lo trasladaron a la Ciudad de México, donde estuvo en poder de la familia Escalante Fouque en el barrio de Coyoacán durante 50 años, hasta 2010, cuando le cedieron los derechos y la propiedad a un prestigiado anticuario, el señor Jorge Urbina, quien a su vez, en 2014 cedió los derechos al grupo de Los Contemporáneos.
Se descubrió que la obra aparece catalogada en el libro Dominico Greco de José Camón Aznar y en diferentes buscadores de internet. “Se realizaron también los análisis químico, genealógico, técnico, espectográfico y radiológico, en los cuales los resultados confirman el origen y la antigüedad de la tela en la que está pintado. También se realizaron pruebas de pigmentos y coincidieron con los utilizados en la época de El Greco.
“Se analizó la madera del marco y el origen. Todo este arduo y minucioso trabajo que nos llevó dos años nos confirma que la obra que hoy se encuentra en la Colección de Los Contemporáneos es, sin duda alguna, una obra pintada al óleo sobre tela por la mano de El Greco”, afirma Riestra.