El Ballet Flolklórico de Amalia Hernández celebra Navidades en México en el Castillo de Chapultepec
Como cada año, el Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández ofrece un emotivo espectáculo en el que se promueven las tradiciones decembrinas, con la finalidad de que prevalezcan y sigan siendo parte importante de la narrativa en la historia de nuestra cultura.
Navidades en México se llevará a cabo del 16 de diciembre al 7 de enero, en la explanada del Museo Nacional de Historia, Castillo de Chapultepec, donde la soberbia arquitectura sirve como marco perfecto para escenificar la espléndida fusión entre las raíces indígenas y la influencia española, dando como resultado nuestras ricas costumbres y tradiciones representadas en esta espléndida puesta en escena.
“Se logra además integrar al Castillo de Chapultepec en un proyecto que alcanza un nivel de excelencia prácticamente todo este año, en especial la música en vivo, los coros con la música, nuevos arreglos, nuevo diseño de iluminación, nuevo diseño de audio. Hemos estado cada año mejorándolo, hemos cambiado este 2017 el repertorio de danzas tradicionales.
“Este año tiene una curva de emoción muy importante, me parece que es fundamental transmitir la cultura de nuestro país y este proyecto del Ballet de Amalia Hernández y el Castillo de Chapultepec creo es un vehículo idóneo para preservar y promover las tradiciones navideñas de la cultura de México”, comentó Salvador López, director del Ballet de Amalia Hernández, en entrevista con Red Capital.
Esta es la onceava edición de Navidades en México, en el que participan más de 100 artistas en escena y en el que se han integrado danzas de los estados de Chihuahua, Tlaxcala, Michoacán, Veracruz y Jalisco, entre otros.
Además de conocidos villancicos que se han rescatado y otros nuevos que se montaron, el público podrá ver un nacimiento vivo, en donde Los Reyes Magos ofrecen danzas en hora y media de espectáculo que cautivará a un público de todas las edades.
El contenido y las coreografías de esta obra son el resultado de una investigación de campo realizada por Amalia Hernández, que incluye entrevistas con miembros de las comunidades que ejecutan numerosos bailes, entre ellos los referentes a la Navidad; archivos de grabaciones de danzas autóctonas, información sobre el vestuario que se utiliza en las celebraciones, además de las caracterizaciones de ciertos personajes tradicionales como el diablo y los arcángeles basados en creencias bíblicas.
Es una representación que retoma parte de la historia de México y sus divinidades indígenas, hasta la llegada de los españoles con el cristianismo, creando un sincretismo de culturas que ha permitido nuevas interpretaciones artísticas.
“Esperamos que este espectáculo se convierta en un obligado para los visitantes y habitantes de la Ciudad de México, creo que hay que darle prioridad a nuestra cultura y este es un show que compite con los mejores espectáculos del mundo, destaca Salvador López.
Navidades en México está conformada por tres actos: el primero recrea el momento de la anunciación y continúa con el montaje de un nacimiento viviente; en esta parte destacan los villancicos entonados por el grupo coral del Ballet.
El segundo cuadro está dedicado a los reyes magos donde el público puede apreciar la Danza de moros de Michoacán, La Culebra de Tlaxcala y la danza de Diablos de Ometepec, Guerrero.
Y el tercer acto se celebra una posada tradicional que comienza con el canto de la letanía para dar paso a una fiesta compuesta por algunos de los bailes folclóricos más conocidos de Jalisco: El jarabe tapatío y el Son de la negra, acompañados por el tradicional mariachi.
Entre las danzas tradicionales que se suman al contenido de la obra destacan Los viejitos, proveniente de Michoacán, La Vaquería de Yucatán y un son jarocho dedicado al nacimiento del niño Dios.
Navidades en México, promotor de la cultura nacional, se hace presente en cada coreografía, como las posadas, una de las tradiciones más arraigadas en nuestro país; las pastorelas, donde se escenifica la lucha del bien contra el mal; la visita de los reyes magos que ofrecen al niño mirra, incienso y oro y los tradicionales villancicos.