CDMX, Capital cultural de América
Y si Andrés Manuel López Obrador va que vuela para ocupar el Palacio Nacional, Claudia Sheinbaum se encamina para ser su vecina a la izquierda del Zócalo en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, sede del Gobierno de la Ciudad de México.
De acuerdo con la misma encuesta del diario Reforma, la ex delegada de Tlalpan tiene un 54% de intención de voto contra un 25% de su más cercana seguidora, Alejandra Barrales de la coalición Por México al Frente (PRD, PAN y MC) y un lejano 13% de Mikel Arriola del PRI.
Desde 1997, la izquierda arribó al entonces Distrito Federal con Cuauhtémoc Cárdenas como jefe de Gobierno. Desde entonces, la capital del país ha tenido gobiernos vanguardistas: la continuidad que le dio Rosario Robles al cierre del gobierno del Ing. Cárdenas, la llegada de Andrés Manuel López Obrador, el relevo de Alejandro Encinas y la etapa de Marcelo Ebrard fueron momentos de innovación, donde se demostró que la izquierda podía y sabía gobernar.
Sin embargo, hubo un proceso de descomposición desde los propios partidos políticos y en el caso de la Ciudad de México, se volvieron a replicar no solamente las prácticas antiguas del corporativismo, el desvío de recursos públicos y también se enquistó de la peor manera la corrupción.
Con la inminente llegada de Claudia Sheinbaum a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, se regresará a ese camino de vanguardia y democracia que había caracterizado a la capital. De entrada, la doctora en Ingeniería energética promete convertir a nuestra ciudad en la capital cultural de América con 12 festivales artísticos, uno por cada mes del año.
Porque, aunque muchos la desdeñen, es la cultura la que promoverá un cambio político y social en nuestro entorno. “Una ciudad innovadora crea artistas, fomenta el arte… las artes enriquecen nuestra ciudad y fomentan el turismo. Es un círculo virtuoso donde además ayuda a eliminar la violencia y reconquista el espacio público potenciando la economía y el empleo”, dice Sheinbaum Pardo.