El acceso es para todos. Piden tarjetas de Metrobús para personas con discapacidad
Por: Jenny Bautista Medina
Arte: Michel Laris
En el marco de la conmemoración del Día Internacional de las Personas con Discapacidad (PcD) que se conmemora el 3 de diciembre, la Ciudad de México se encuentra lejos de poder garantizar el derecho a la movilidad de las personas con discapacidad. Así lo afirman algunos usuarios del Metrobús (MB), como es el caso de Marcela Vite, una mujer con discapacidad motriz, usuaria de silla de ruedas de 30 años de edad.
Exigen al gobierno de la CDMX tarjeta de acceso al Metrobús
La Ley de Movilidad, actualizada en 2018, establece en su artículo 6° que la prioridad se centra en los peatones, en especial con las PcD. Aunado a esto, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) del 2010, la población con discapacidad en la CDMX asciende a 481,847. Se trata de una población en aumento que debido a diversos factores como las enfermedades, accidentes y la propia edad, da como resultado un gran reto para el transporte público accesible.
Marcela, quien ha presentado al menos 20 quejas en la página del MB, además de dos en el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED) y una en la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), asegura que en el sistema de transporte conocido como “Metrobús” no se garantiza el derecho a la movilidad de las personas con discapacidad.
Para que una persona en silla de ruedas pueda ingresar a los andenes del metrobús, tiene que pasar por una puerta especial que sólo se abre con una tarjeta que tienen los policías designados. Si estos no se encuentran, simplemente no es posible ingresar. Lo cual ocurre con demasiada frecuencia.
“¿De qué me sirve que dentro de las estaciones del MB haya accesibilidad, con rampas, botones de alerta y elevadores, sí al llegar a la estación no puedo entrar?”, expresó molesta Marcela, quien trabaja como auxiliar administrativo en la alcaldía de Iztacalco y diariamente realiza diferentes recorridos a lo largo de la ciudad ya que, además de trabajar, acude a rehabilitación una vez por semana al Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) y a natación tres veces a la semana en la Alberca Olímpica.
El artículo 7° inciso II que refiere a la accesibilidad, en la Ley de Movilidad expresa: “Garantizar que la movilidad esté al alcance de todos, sin discriminación de género, edad, capacidad o condición, a costos accesibles y con información clara y oportuna”. La prioridad aquí mencionada se anula completamente si no se puede acceder al andén del MB.
“He esperado 45 minutos afuera de la estación hasta que llega un policía que me permite entrar. He tenido que rodar a otras estaciones, le he pedido a la gente que me ayude a pasar con todo y silla, incluso he tenido que pagar taxi para no llegar tarde al trabajo y además he perdido citas médicas a causa de estos retrasos”, confiesa Marcela ante la situación que se sale de sus manos, pues salir con tiempo de casa no asegura la llegada a tiempo a sus compromisos sin la posibilidad de abordar el transporte.
Las condiciones del sistema Metrobús para las personas con discapacidad
El metrobús de la CDMX cuenta con 7 líneas y un total de 220 estaciones, solo por mencionar la demanda que tiene la Línea 1, que va del Caminero a Indios Verdes, es de 480 mil pax / día, es decir, haciendo la comparativa de la cantidad de PcD que viven en la CDMX, es similar a la demanda que hay en esta línea, sin tomar en
cuenta el espacio extra que se necesita por el uso de silla de ruedas, andaderas, muletas, perros guía, etc.
Tal como lo menciona la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda en su Manual de normas técnicas de accesibilidad: “Se trata más bien de planear y diseñar para todos, con base en la observancia y reglamentación basada en el diseño universal, a fin de beneficiar al sector de las PcD y garantizar también el acceso y uso para la mayoría”.
“Las personas con discapacidad estamos siendo discriminadas al tener que depender de terceros para poder ejercer nuestro derecho y libertad de movilidad. Es necesario que realmente se nos tome en cuenta. Nada sobre nosotros sin nosotros”, finaliza Marcela ante la impotencia de no recibir soluciones a sus quejas. Si bien es cierto que la Secretaría de Movilidad ha procurado cubrir la necesidad de accesibilidad, no ha sido suficiente, lo cual se resolvería con la emisión de tarjetas de libre acceso al MB garantizando así realmente el servicio.