En busca de las ruinas de México-Tenochtitlan

“…Tornamos a ver la Gran Plaza y la multitud de gente que en allí había, unos comprando y otros vendiendo, que solamente el rumor y zumbido de las voces y palabras que allí había sonaba más que de una legua, y entre nosotros hubo soldados que habían estado en muchas partes del mundo, y en Constantinopla, y en toda Italia y Roma, y dijeron que plaza tan compasada y con tanto concierto y tamaño y llena de tanta gente no la habían visto”. Fragmento de Bernal Díaz del Castillo correspondiente a libro Historia verdadera de la conquista de la Nueva España.

CABEZA DE SERPIENTE

Ojo, cuando pases por la esquina de Pino Suárez y República de El Salvador, no olvides mirar a la esquina del Museo de la Ciudad de México, porque a ras de suelo se encuentra incrustada una cabeza de serpiente emplumada tallada en piedra que durante el Virreinato fue usada como elemento decorativo del Palacio de los Condes de Calimaya.

Gracias a los relatos de Bernal Díaz del Castillo, uno de los conquistadores de Tenochtitlan, podemos imaginar la magnificencia de la ciudad más importante de Mesoamérica, algo que seguro muchos capitalinos se han preguntado al caminar por el Centro Histórico de la Ciudad de México.

Es en esta zona de la ciudad donde se guardan los mayores secretos y joyas prehispánicas. Con el paso del tiempo ha sido posible el hallazgo de ruinas, templos y esculturas mexicas, algunos están a simple vista, mientras que para admirar otros es necesario ir a su encuentro.

Aquí te presentamos algunos de los descubrimientos más representativos.

TEMPLO MAYOR

Sitio emblemático que comenzó a gestarse a partir de que el 21 de febrero de 1978 obreros de la Compañía de Luz y Fuerza localizaron la escultura monumental de Coyolxauhqui (diosa mexica lunar). En la actualidad, las 1.2 hectáreas de la zona arqueológica del Templo Mayor forman parte del paisaje urbano del primer cuadro de la ciudad.

En el sitio sobresale el edificio dedicado a Huitzilopochtli, y a Tláloc, el dios de la lluvia. A un costado se encuentra el museo de sitio en el que se exhiben más de 14 mil objetos descubiertos en excavaciones arqueológicas, desde piezas de ofrendas, máscaras, objetos de caza y joyas.  Hasta marzo puedes visitar la exposición temporal “Xipe Tótec y la regeneración de la vida”, dedicada a una de las deidades más veneradas de los mexicas.

Dónde: Seminario 8.
Horario:Martes a domingo de 09:00 a 17:00 horas.
Entrada: $65.

MUSEO DE SITIO CCEMX-INAH

Uno de los lugares donde convive el pasado y el presente es el sótano del Centro Cultural de España en México, donde te espera uno de los más sorprendentes hallazgos prehispánicos de los últimos años.

Este espacio salió a la luz gracias a los trabajos de ampliación del recinto y en él puedes ver, en un espacio de 19 metros de largo por 8 de ancho, los basamentos del Calmécac, colegio donde eran educados los hijos de los nobles mexicas. Entre las piezas más valiosas están la Mandíbula Esgrafiada y dos de las siete almenas de barro encontradas a más de 5 metros de profundidad y se cree formaban parte del decorado superior del Calmécac.

Dónde: Guatemala 18 y Donceles 97
Horario: de martes a sábado de 10:00 a 21:00 horas. Domingos de 10:00 a 16:00 horas
Entrada libre

TEMPLO EHÉCATL-QUETZALCÓATL

Conocida popularmente como la pirámide del Metro, es en realidad un pequeño adoratorio descubierto durante los trabajos para la construcción de la Línea 2, entre 1968 y 1979. Por su forma circular en la parte superior, los arqueólogos señalan que estaba dedicado a Ehécatl-Quetzalcóatl, dios del viento.

Este pequeñita “zona arqueológica” de 88 metros cuadrados es la más visitada de todo México, pues al año puede ser admirada hasta por más de 50 millones de personas, cifra muy superior al registrado en Teotihuacan, que recibe más de 2.5 millones de visitantes en el mismo periodo.

Dónde: Metro Pino Suárez. José María Izazaga y Pino Suárez.

VENTANAS ARQUEOLÓGICAS

Échale una mirada al pasado en las decenas de ventanas arqueológicas, ubicadas a lo largo y ancho del Centro Histórico, que dejan al descubierto basamentos y ruinas de Tenochtitlan. Las puedes encontrar en los jardines de Palacio Nacional, los sótanos de la Catedral Metropolitana, el Antiguo Palacio del Arzobispado (donde puedes ver parte de la Escalinata del Templo de Tezcatlipoca), la Casa de las Ajaracas y en el Museo de la Caricatura.

Las dos más recientes se ubican en la calle República de Argentina, entre Justo Sierra y San Ildefonso, y en ambas se ve el basamento piramidal de uno de los edificios más importantes del Templo Mayor. De acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia, el llamado Gran Basamento Mexica mide aproximadamente 40 metros de ancho de norte a sur. 

SABÍAS QUE…

Entre los primeros hallazgos prehispánicos en la ciudad destacan los monolitos de Coatlicue y la Piedra del Sol, localizados en 1790 y 1791, respectivamente; ambos se exhiben en el Museo Nacional de Antropología. Mientras que las primeras excavaciones del Templo Mayor comenzaron hacia 1913, cuando Manuel Gamio, antropólogo mexicano, descubrió la esquina suroeste.