¿Por qué mi celular es cada vez más lento?
Lo sabemos, resulta frustrante estar usando nuestro smartphone y que de pronto se tarde mucho en hacer cierta acción o en cambiar a otra app que también queremos tener abierta. Esta experiencia es aún más frustrante cuando eliminamos imágenes o aplicaciones y el problema no se soluciona ¿por qué pasa esto? Aquí va la respuesta.
Una de las características que tienen los dispositivos electrónicos como smartphones, tablets, relojes inteligentes o computadoras es que necesitan de un procesador para realizar sus funciones. Estos procesadores tienen cierta capacidad determinada por sus núcleos y la velocidad de trabajo que tienen entre ellos.
El problema viene cuando le pedimos a un dispositivo electrónico que realice más funciones de las que son capaces; esto se podría traducir en tener múltiples apps abiertas al mismo tiempo o ejecutar algunas que tengan un gran consumo, como puede ser ver videos o usar apps que utilicen muchos recursos, como es el caso de Pokémon Go que usa el GPS, la cámara, el giroscopio y hasta el audio al mismo tiempo. Entre más trabajo se le pida al celular más necesita usar su procesador y, si no es uno muy poderoso, se forzará al grado de sobrecalentarse y, en algunos caso, también llegará a trabarse debido a que se excedió su capacidad de trabajo.
Para ayudarle a tu smartphone para que se caliente y un poco menos, es recomendable cerrar todas las apps de manera regular para que no se estén ejecutando en segundo plano sin que nos demos cuenta y, muy importante, no tener instaladas aplicaciones que devoren los recursos del celular (por mucho que nos gusten).
Un tip muy sencillo para saber si determinada app consume muchos recursos o no es el de analizar qué partes del teléfono ocupa, por ejemplo la cámara, las bocinas, los sensores o la cantidad de colores en la pantalla, todo esto cuenta y es siempre el procesador el que debe de proveer de esta “fuerza” de trabajo.
¿CÓMO SABER QUÉ TAN POTENTE ES MI PROCESADOR?
Sin importar qué compañía lo fabrique, un procesador se divide en tres partes principales: los bits, los Ghz y los núcleos. Una buena combinación es un procesador que tenga muchos bits en su configuración (idealmente 64), con una buena velocidad de procesamiento, la cual identificarás con la nomenclatura Ghz. En cuanto a los núcleos, es la parte más engañosa de un procesador, ya que no necesariamente más es mejor, como es en el caso de los bits y los Ghz.
LA MEMORIA RAM ES MUY IMPORTANTE
No importa qué tan potente sea el procesador, siempre va a depender de la RAM para ejecutar las tareas de manera eficiente, es por eso que si tienes 1GB o 2GB de RAM batallarás más con tu dispositivo y se hará lento conforme tengas más y más aplicaciones abiertas de manera simultánea. El problema viene con el costo, ya que mientras más GB de memoria RAM tenga un dispositivo más se elevará su precio ya que esto conlleva también un procesador más potente, aunque definitivamente el gasto vale la pena.
FACEBOOK NO ES EL MEJOR ALIADO
Aunque es una de las aplicaciones más descargadas y mejor calificadas del mundo, sin importar de qué sistema operativo estamos hablando, la realidad es que Facebook es una de las apps que más consumen tu procesador, lo que implica que tu smartphone se caliente y, lo que es peor, que tu batería te dure cada vez menos. Para evitar que esto pase, utiliza la versión Lite de la app, la cual te permitirá hacer casi las mismas funciones que la app original pero con menor consumo de batería y de datos móviles.