Maratón CDMX, lo tienes que vivir
Finalizó Río 2016 y seguimos vinculados a los Juegos Olímpicos gracias al Maratón de la Ciudad de México, que se celebra este domingo 28 de agosto. Esta prueba atlética envuelve muchos mitos y, gracias a ella nació el atletismo y, en consecuencia, los Juegos Olímpicos, todo esto en la Antigua Grecia.
Se dice que Filipides, un soldado griego especialista en correr largos trayectos, avisó el triunfo del ejercito griego sobre los persas, corriendo de la ciudad de Maratón a Atenas, un recorrido total de 42 mil 195 metros; pero Filipides corría más que eso; algunos escritos señalan que una vez corrió de Maratón a Esparta, más de 250 kilómetros en dos días. ¿Y qué tienes qué ver esta historia griega con los mexicanos? Tal vez no mucho, pero en la época prehispánica, Moctezuma hacía traer diariamente pescado fresco de Tuxpan, Veracruz, a la Capital, a la Gran Tenochtitlán.
Mito o realidad, el trayecto más cercano serían más de 260 kilómetros, más de lo que Filipides llegó a recorrer, pero con relevos que debían subir y bajar por sinuosos caminos; mínimo debieron ser 26 relevos para que cada uno corriera 10 kilómetros con un promedio de 35 minutos, para que el fruto del mar llegara a más tardar en 15 horas y listo para cocinar.
Como es ya una costumbre, la XXXIV edición de la Maratón de la CDMX de este domingo, arrancará en el Hemiciclo a Juárez, en el Centro Histórico, y concluirá en el Estadio Olímpico de Ciudad Universitaria. En punto de las 6:45 horas, alrededor de 30 mil corredores intentarán recorrer, a su propio ritmo, el trayecto de Maratón a Atenas.
Y es que los mexicanos somos buenos para recorrer trayectos largos, si no es por marchas, es por encharcamientos, cierres de vialidades o por el puro placer de conocer más de nuestra capital.
Las recomendaciones básicas para los corredores son: un día antes hidratarse bien, comer pasta, dormir temprano, por lo menos lo suficiente (8 horas), no tomar bebidas alcohólicas, desayunar ligero, como un plátano y un te, obvio, pasar al baño a desechar lo que tu cuerpo no necesita y no te agarren las prisas a media Maratón; llegar con 30 minutos (mínimo) antes del arranque.
Correr una Maratón es un juego mental; si tienes la condición, no dudes en que lo lograrás, seguro que sí, pero llega un punto en que el trayecto se hace eterno, en que tal vez aparezca una molestia en tu cuerpo… ¡NO TE DETENGAS! Sigue adelante, ¡TÚ PUEDES! Sólo si esa molestia se convierte en dolor, acércate a uno de los 34 módulos de asistencia médica que habrá durante el recorrido. Si eres de los que una semana antes intentó prepararse, no juegues con tu vida y “corre” sólo hasta donde tu cuerpo te permita.
LAS PORRAS: EL GRAN MOTIVADOR
El apoyo de la familia, de los amigos y hasta los desconocidos es fundamental. Ver y escuchar como otras personas te incentivan a seguir adelante es un gran apapacho para el corazón y la mente. Desde la salida (Hemiciclo a Juárez) díganle a su corredor que lo ven en la meta; de ahí váyanse a echar un cafecito y luego trasládense al kilómetro 20, sobre Paseo de la Reforma, saliendo del Metro Auditorio, hacia Lomas de Chapultepec, y esperen a que su corredor pase. Haber recorrido casi medio maratón ya es un gran triunfo, que se escuchen los gritos de ¡ÁNIMO!
Quien está preparado, medio maratón no es difícil, pero el superar los 30 kilómetros se empieza a convertir en un martirio, así que, trasladarse a la avenida Insurgentes Sur, por la zona del World Trade Center y que su corredor los vea y escuche apoyándolo, tengan la seguridad que le están dando la mejor batería para continuar hasta C.U., en donde no pueden perderse la entrada y ver la culminación de ese esfuerzo cruzar por el arco de META.
Disfruten este domingo, en el que habrá 15 grupos musicales para todos los gustos, distribuidos en el trayecto de más de 42 kilómetros. Si corres o apoyas, comparte tus recomendaciones y experiencia en nuestras redes sociales, pero ¡VIVE EL MARATÓN DE LA CIUDAD DE MÉXICO!
